El despliegue del nuevo sistema de cotización de autónomos en función de sus ingresos reales continuará desarrollándose en 2024, en el que los trabajadores por cuenta propia pagarán a la Seguridad Social cuotas mensuales que irán desde los 225 a los 530 euros, dependiendo de sus rendimientos netos.
Este sistema de cotización, acordado con las principales
organizaciones de autónomos, arrancó a principios de 2023 y contará con un
periodo de transición de nueve años, hasta 2032.
Consta de 15 tramos de cuotas que en 2023 han oscilado entre los 230
euros hasta los 500 euros y que en 2024 lo harán desde los 225 a los 530 euros.
En 2025, las cuotas irán desde los 200 a los 590 euros mensuales. De cara a
2026, los interlocutores tendrán que pactar los tramos para los próximos años,
hasta 2032.
Los autónomos tienen la posibilidad de cambiar de tramo cada dos meses,
con un total de seis cambios al año, para adaptar su cotización a las
previsiones de ingresos en cada época del año y de su actividad profesional.
Los rendimientos netos se calcularán deduciendo de los
ingresos todos los gastos producidos en ejercicio de la actividad y necesarios
para la obtención de ingresos del autónomo.
Sobre esa cantidad, se aplicará adicionalmente una deducción por gastos
genéricos del 7% (3% para los autónomos societarios). El resultado será la
cifra que determinará la base de cotización y la cuota correspondiente.
Declaración
de la Renta obligatoria
Al final del ejercicio fiscal y una vez conocidos los rendimientos
netos anuales, se regularizarán las cotizaciones, devolviéndose o reclamándose
cuotas en caso de que el tramo de rendimientos netos definitivos esté por
debajo o por encima del indicado por las previsiones durante el año.
De este modo, y debido al nuevo sistema de cotización,
todas aquellas personas que hayan estado dados de alta en 2023 como autónomos,
aunque sólo sea un día, tendrán que hacer a partir de 2024 de manera
obligatoria la declaración de la Renta.
Antes de la entrada en vigor del nuevo sistema de cotización, sólo
estaban obligados a ello los autónomos personas físicas que en el año previo
hubieran obtenido más de 1.000 euros de rendimientos netos en su negocio.
Con el nuevo sistema de cotización, uno de cada dos autónomos tendrá
una cuota más baja que la actual, mientras que un 25% cotizará más y un 25%
cotizará menos, según estimaciones de la Seguridad Social.
Cuotas y
tramos
En 2024, la cuota para un autónomo con rendimientos netos (ingresos
menos gastos) iguales o inferiores al salario mínimo interprofesional será de
225 euros, frente a los 230 euros de 2023.
Para aquellos con rendimientos netos superiores a 1.300 euros e
inferiores o iguales a 1.500 euros, y por encima de 1.500 euros e inferiores o
iguales a 1.700 euros, la cuota será de 294 euros, la misma que en 2023 y 2025.
Mientras que en los tramos de rendimientos más bajos la cuota decrece
en el periodo 2023-2025, a partir de rendimientos netos superiores a 1.700
euros la cuota se va incrementando a lo largo de esos tres años.
Así, un autónomo que presente rendimientos netos por encima de los
3.620 euros y hasta 4.050 euros, o igual a ese monto, (tramo 13) pagará 400
euros en 2024, diez euros más que en 2023 pero 90 euros menos de lo que pagará
en 2025.
En el último tramo, el decimoquinto, se encuentran todos los autónomos con rendimientos netos superiores a los 6.000 euros. Su cuota para este 2024 será de 530 euros, lo que supone 30 euros más que en 2023 pero 60 euros menos de lo que abonarán en 2025.