Gestha reclama "una gran reforma fiscal" que arregle el actual "parcheo" del sistema tributario
8 de octubre de 2019
Gestha reclama "una gran reforma fiscal" que arregle el actual "parcheo" del sistema tributario
El sindicato de técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) reclama "una gran reforma fiscal" para arreglar el "parcheo" que, consideran, padece el sistema tributario español desde su implantación a finales de los años 70 del pasado siglo.
Así lo indicó el presidente de Gestha, Carlos Cruzado, quien aseguró que el sistema tributario español "tiene problemas de equidad y de recaudación", con seis puntos menos de presión fiscal respecto a la UE que suponen 70.000 millones menos de euros de recaudación.
Así, Gestha critica que, en el Impuesto de Sociedades, las grandes empresas que tributan como grupo tienen una tributación efectiva del 6,5%, mientras las pymes lo hacen al 15%, por lo que, aunque la consideran "un paso pequeño", aprueban la medida acordada por PSOE y Unidas Podemos para establecer un tipo efectivo mínimo del 15%.
"Es evidente que el impuesto no funciona", afirmó en este sentido Cruzado, quien añadió que "la reforma integral de 2015 no parece que haya acabado con esos agujeros que tiene este impuesto y que llevan a que estemos en poco más por encima del 50% de la recaudación que tuvimos antes de la crisis".
Para Cruzado, "uno de los problemas es la baja cotización de las grandes empresas y sobre todo de las digitales, que están tributando a tipos efectivos por debajo de la mitad de lo que hacen el resto". Por ello, apuntó que esta cuestión "se debería resolver a nivel global, pero hay problemas para llegar a ese acuerdo en la OCDE, el G20 o la UE", lo que está conduciendo a que algunos países tomen medidas unilaterales, lo cual consideran "un pequeño paso" pero positivo.
IRPF
En cuanto al IRPF, el presidente de Gestha indicó que "a pesar de que se habla de 'gran presión', ésta es sobre los rendimientos del trabajo", ya que "más del 84% del total de la recaudación por IRPF se corresponde por el gravamen a pensionistas y trabajadores; el 9% sobre los rendimientos de capital y el 7% sobre las actividades económicas". Para Cruzado, "esto es una distorsión y debería conllevar medidas", y recordó que "la OCDE aconsejaba a España replantear esta dualidad, el hecho de que las rentas de capital tributen a tipos muy inferiores a los del trabajo".
En este sentido, para Gestha "habría que ir equiparando esas tributaciones de los rendimientos de capital a la del trabajo", por lo que considera "urgente sacar del concepto del rendimiento del ahorro, y por tanto de la tributación del rendimiento de capital, a los incrementos especulativos de patrimonio, aquellos que se producen en un año".
Otra medida que propone Gestha para modificar el IRPF es replantear determinadas deducciones como la de la aportación a planes de pensiones, algo que también plantean la OCDE y el FMI, y sustituirla por una reducción en la cuota para hacerla más equitativa. "Ahora mismo esa deducción es regresiva porque beneficia a quien tiene tipos marginales más altos", apuntó Cruzado.
Además, el presidente de Gestha recordó que España se sitúa en el puesto 15 de la UE en cuanto al tipo marginal máximo en IRPF, "por detrás de todos los países más desarrollados", y subrayó la necesidad de aumentar la progresividad de este impuesto.
Sucesiones y Patrimonio
Por otra parte, Cruzado también se refirió a la necesidad de revisar los impuestos cedidos a las comunidades autónomas, como el de Sucesiones y el de Patrimonio, tributos sobre los que defendió que se mantengan debido a su efecto redistribuidor, pero estableciendo "cierta armonización y unos tipos mínimos que eviten que desaparezcan".
"Habría que limar las diferencias entre las comunidades, pero sin acabar con él", indicó Cruzado en referencia a aquellas comunidades, como Madrid, que en la práctica casi han eliminado estos tributos, forzando a otras comunidades a bajarlos, por lo que propone "elevar los mínimos".
En concreto, sobre el de Sucesiones aseguró que "es un impuesto con un efecto redistributivo importante, que intenta atajar esa acumulación de grandes patrimonios intergeneracionales y que, en definitiva, es un impuesto que no está en tela de juicio en la mayoría de países y que debería mantenerse".
Sobre este mismo tributo, Cruzado desmintió que haya un elevado número de renuncias a las herencias y que las que se producen "no están relacionadas con la mayor o menor gravosidad del impuesto, sino con el mercado inmobiliario y la aceptación de inmuebles con grandes hipotecas que en ocasiones son superiores al valor de mercado, en el caso de inmuebles que se adquirieron durante el auge del 'boom' inmobiliario".
"En la mayoría de comunidades las herencias tipo medias prácticamente no tributan", afirmó, agregando a continuación que la Comunidad de Madrid "está en la media" en lo referente a renuncias "a pesar de tener este impuesto bonificado al 99%, por lo que no se puede decir que las renuncias estén relacionadas con lo gravoso del impuesto".
En este sentido, Cruzado criticó que las bajadas de impuestos llevadas a cabo por el Gobierno de la Comunidad de Madrid "choca" con las recomendaciones, en la dirección contraria, de la OCDE y Banco Central Europeo así como con "la insuficiencia de recaudación que tiene España respecto a la UE y con el reclamo de Madrid al Estado del dinero de las entregas a cuenta". "Es contradictorio que renunciaran el año pasado a prácticamente 1.000 millones de euros por la bonificación al 100% del Impuesto de Patrimonio", agregó, recordando también que "el 60% de los mayores capitales de España, los que declaran más de 30 millones, no están tributando por este impuesto porque están en Madrid".